Daniel Dove, uno de los administradores de EliteTorrents, ha sido condenado a una pena de 18 meses de prisión, otros 3 años de libertad vigilada y a pagar una multa de 20.000 dólares por haber puesto a disposición de los cientos de miles de visitantes de su web trackers para que se bajaran películas que se acababan de estrenar en los cines de medio mundo.
El caso viene de lejos. Se destapó en mayo del 2005, cuando el FBI cerró el sitio a petición de la Motion Picture Association of America (MPAA), que había interpuesto una demanda contra los propietarios del mismo argumentando que estaban cometiendo actos de piratería al permitir que los internautas accedieran gratuitamente a películas que habían producido, entre las que destacaba la por aquél entonces novedosa ‘Star Wars: La Venganza de los Sith’.
Scott McCausland y Grant Stanley, los otros 2 administradores de EliteTorrents, se declararon desde un primer momento culpables de los cargos por los que se les imputaba y fueron condenados a 5 meses de cárcel, otros 5 de reclusión en sus respectivos domicilios y a unas multas de 3.000 dólares. Mientras tanto, Dove optó por declararse no culpable y decidió plantar cara a la MPAA. Su osadía le ha costado cara. Deberá pasarse el próximo año y medio entre rejas.