TSMC, Samsung e Intel están inmersas en una batalla tecnológica que debe dilucidar cuál de ellas será la primera en tener listo el proceso de 2 nanómetros que se empleará en los chips de nueva generación que se comercializarán en los próximos años.
En juego hay un mercado que en el último año ha generado una cifra de negocio cercana a los 500.000 millones de euros y que está previsto que crezca significativamente debido a la gran demanda de procesadores ultra rápidos para servicios basados en la inteligencia artificial.
Cuanto más pequeños son los transistores que forman los circuitos integrados, mayor es su rendimiento y menor su consumo de energía. De ahí que Apple, Qualcomm, Nvidia, AMD, MediaTek y la propia Samsung Electronics traten de que sus chips sean fabricados con los últimos y más avanzados nodos disponibles.
Apple suele ser la compañía que estrena los nuevos procesos una vez llegan al mercado debido a los grandes pedidos que puede realizar y el elevado precio que puede pagar por los mismos. Sin ir más lejos, el chip A17 Pro que impulsa al iPhone 15 Pro y al iPhone 15 Pro Max ha sido el primero en ser fabricado con el nodo de 3 nanómetros de TSMC.
Y todo hace indicar que va a suceder lo mismo con el de 2 nanómetros. Tanto es así que, según informa el Financial Times, TSMC ya ha mostrado los primeros prototipos de su proceso N2 a sus principales clientes, con Apple y Nvidia a la cabeza.
También lo está haciendo Samsung, que además está ofreciendo descuentos para tratar de atraer a compañías interesadas en su tecnología. Y es que, el gigante surcoreano ve en el nodo de 2 nanómetros la oportunidad de ganar terreno a TSMC, que actualmente posee una cuota de mercado en la fabricación de semiconductores del 66%, mientras que la de Samsung es del 25%.
Por lo pronto, parece que su estrategia está dando resultados y todo hace indicar que Qualcomm hará uso del nuevo nodo de Samsung en la fabricación de los chips de nueva generación que lanzará en los próximos años.
Sea como fuere, conviene señalar que no está previsto que TSMC, Samsung o Intel tengan a punto esta tecnología hasta la segunda mitad de 2025. Falta por saber si, para entonces, seguirán priorizando los chips móviles, como ha sido norma habitual hasta ahora, o si se decantarán por los de escritorio debido a la enorme demanda que se prevé que exista en torno a los mismos debido a la emergencia de la inteligencia artificial.