Valve ha anunciado que el cliente de Steam dejará de funcionar en Windows 7, Windows 8 y Windows 8.1 a partir del 1 de enero de 2024. Coincidiendo con la llegada del nuevo año, para ejecutar este programa será necesario utilizar Windows 10 o Windows 11.
Esta decisión se fundamenta en que el cliente de Steam para Windows y macOS integra una versión adaptada de Chromium Embedded Framework para renderizar el contenido web que muestra en pantalla. Algo que, en este caso, supone un problema puesto que las nuevas versiones de Google Chrome dejaron de funcionar en Windows 7/8/8.1 el mes pasado.
Así pues, quien utilice habitualmente este software y todavía tenga instalado uno de esos sistemas operativos tiene hasta finales de año para actualizarlo. En caso de no hacerlo, el cliente de Steam no le cargará y no podrá acceder a los juegos que haya comprado a través del mismo.
La medida de Steam es comprensible, especialmente si tenemos en cuenta que la propia Microsoft dejó de ofrecer soporte técnico y actualizaciones para Windows 7 en enero de 2020 y para Windows 8.1 a principios de este mismo año.
De hecho, Fortnite ha dejado de ser compatible con Windows 7/8 coincidiendo con el inicio del Capítulo 4 Temporada 2 y, conforme vaya pasando el tiempo, la mayoría de desarrolladores adoptarán posiciones similares e irán dejando de lado progresivamente a estos vetustos sistemas operativos.