No corren buenos tiempos para los profesionales del sector de los videojuegos. En los dos meses que llevamos de año, miles de empleados han perdido su puesto de trabajo y la situación, lejos de mejorar, parece que va cada vez a peor.
La última empresa en sumarse a esta desdichada tendencia ha sido Sony Interactive Entertainment, que hace unos minutos ha anunciado que va a prescindir de los servicios de 900 personas, que representan el 8% de su plantilla actual.
En una carta abierta publicada en su web oficial, su todavía presidente y CEO, Jim Ryan, ha explicado que los despidos van a afectar a departamentos de PlayStation repartidos por todo el mundo, incluidos algunos estudios muy conocidos.
Y es que, la reestructuración va a llegar incluso a desarrolladores estrella como Naughty Dog, creadores de franquicias como Uncharted o The Last of Us, Insomniac Games, que están detrás de Spider-Man o Ratchet & Clank, o Guerrilla Games, conocidos por la saga Horizon o Killzone.
Pero ninguno lo va a sentir tanto como London Studio, autor de la saga SingStar, que va a cerrar sus puertas completamente. También se van a producir reducciones de personal importantes en Firesprite, que recientemente ha colaborado en la creación de Horizon Call of the Mountain para el PlayStation VR2.
Ryan ha señalado que estas medidas de fuerza se han tomado para racionalizar sus recursos, centrarse en la sostenibilidad a largo plazo de la compañía y ofrecer las mejores experiencias de juego posible a su comunidad de seguidores.
Es decir, las justificaciones de siempre. Mientras tanto, 900 empleados se van a quedar en la calle. A riesgo de equivocarme, asumo que ninguno de los directivos que tomaron las decisiones que han llevado a la compañía a encontrarse en la situación en que está ahora mismo se a a ver afectado por los despidos. En fin…