Situada a una distancia de 2,5 millones de años luz, Andrómeda es la galaxia espiral más cercana a la Vía Láctea y el objeto visible a simple vista más alejado de la Tierra. Observaciones realizadas por el Telescopio Espacial Spitzer han revelado que en sus dominios hay aproximadamente un billón de estrellas y que tiene 7,1 x 1011 masas solares.
Andrómeda se está acercando a nosotros a una velocidad de unos 300 kilómetros por segundo, de tal manera que los científicos creen que ambas galaxias colisionarán en unos 4.000 millones de años. Es por ello que, a partir de los datos aportados por el Hubble, la NASA ha realizado esta simulación por ordenador que tenéis a continuación en la que nos muestran cómo se producirá este evento:
Sea como fuere, no hay razón para la preocupación puesto que mucho antes de dicha colisión la vida en la Tierra habrá dejado de ser viable producto del gradual incremento en la luminosidad del Sol, que calentará la superficie de nuestro planeta hasta hacer imposible la existencia de agua líquida en unos 1.400 millones de años.