La represión sanguinaria que el régimen despótico del genocida Bashar al-Assad lleva ejerciendo contra sus conciudadanos desde enero del año pasado, sumada a la acuciante falta de medios que afecta a la mayor parte de la población, ha llevado a un grupo de rebeldes sirios a construir un tanque casero reforzado con planchas procedentes de coches desvencijados.
Pero además de tener un aspecto exterior ciertamente llamativo, este vehículo al que sus creadores han bautizado con el nombre de Sham II guarda una sorpresa bajo su armadura: la ametralladora con la que va equipado es controlada por uno de sus ocupantes mediante un mando de consola. Tal y como suena. El siguiente vídeo deja constancia de ello: