El LG Optimus 2X aún no se ha puesto a la venta, pero hace mucho tiempo que se viene hablando de este smartphone debido a las espectaculares características técnicas de las que hace gala. Su lanzamiento en Europa estaba previsto para el mes de enero, pero finalmente el fabricante surcoreano ha pospuesto su llegada unas semanas. Aunque no ha habido explicación alguna del motivo que ha ocasionado este retraso -o quizá precisamente por ello- la expectación en torno al mismo sigue siendo muy elevada.
Su chip Tegra 2 de doble núcleo a 1 GHz, la pantalla capacitiva de 4 pulgadas con una resolución de 480 x 800 píxeles con la que cuenta, los 380 MB de RAM de los que dispone, su cámara de 8 megapíxeles o la posibilidad de grabar vídeos con una resolución de 1080p tienen buena culpa de ello.
Los números son mareantes pero, ¿hasta qué punto sus prestaciones efectivas están a la altura del hardware que incorpora? En GSM Arena recibieron ayer una unidad de prueba y han estado comprobando qué tal funciona. Tras los primeros tests a los que han sometido al LG Optimus 2X, han constatado que, efectivamente, supera en fuerza bruta, y por amplio margen además, a cualquier otro smartphone del mercado.
El problema es que Android 2.2 Froyo, el sistema operativo que equipa, no es capaz de sacar el máximo partido al SoC de Nvidia, circunstancia ésta que limita su rendimiento. A priori, Android 2.3 Gingerbread no es un paso adelante en este aspecto, por lo que parece que habrá que esperar hasta futuras versiones para exprimir su potencial.
Por otra parte, la cámara que incorpora presenta un comportamiento satisfactorio, tanto en el colorido y calidad general de las fotografías que toma como en el de los vídeos, si bien en estos últimos no se llega a los anunciados 24 fotogramas por segundo cuando se graban contenidos en alta resolución a 1080p.
En este vídeo tenéis podéis ver al smartphone en acción:
Aunque serán necesarios más análisis y en mayor profundidad, las primeras conclusiones que se pueden extraer del LG Optimus 2X es que es una pieza de hardware fenomenal que se ve limitada por la ausencia de un software que le saque verdadero provecho. Por cierto, en Amazon ya es posible reservarlo por 499 euros. Un precio elevado, qué duda cabe, pero razonable y hasta diría que predecible habida cuenta de las características técnicas del aparato.