Aunque la PlayStation Vita no se va a poner a la venta en tierras japonesas hasta este próximo sábado, día 17 de diciembre, en China hace ya unos cuantos días que se puede conseguir un clon pirata que imita con descaro las formas de la próxima consola portátil de Sony por un precio aproximado de unos 92 euros.
Esta copia, que ha recibido el nombre comercial de Yinlips YDPG18, está impulsada por un procesador a 1,2 GHz, incorpora 512 MB de RAM, dispone de una pantalla táctil de 5 pulgadas con una resolución de 800×400 píxeles, está impulsada por el sistema operativo Android 2.2, cuenta con un sensor de movimiento, una cámara frontal y otra trasera, Wi-Fi, un puerto HDMI, otro USB y supuestamente puede reproducir vídeos en alta resolución.
Más allá de la abismal -y comprensible- diferencia que hay entre el hardware interno de uno y otro aparato, la copia china no dispone del segundo stick analógico de la PS Vita ni de los sensores táctiles de su parte trasera.
Evidentemente, los juegos creados para la PS Vita no van a funcionar en la Yinlips YDPG18, así que el fabricante chino ha equipado esta consola con los emuladores que hay en Android para la NES, la Gameboy, la Super Nintendo, la GameBoy Advance, la Nintendo 64 y la PlayStation y han redondeado el conjunto con un surtido de juegos implementados en Flash.