Tras más de 9 años en el mercado, Nintendo ha decidido jubilar a la venerable 3DS y esta semana ha anunciado que ya no va a fabricar más unidades. Así pues, una vez se agoten las que comercios y la propia compañía japonesa todavía tienen en stock, ya no será posible comprar nunca más esta emblemática consola portátil.
La Nintendo 3DS se puso a la venta el 26 de febrero de 2011, en plena fiebre por el 3D. Los estudios de Hollywood no desaprovechaban la oportunidad de publicitar continuamente las escenas en 3 dimensiones que incorporaban sus últimas películas; la mayoría de nuevos televisores que se vendían por entonces ofrecían la opción de visualizar contenidos en un rudimentario 3D; incluso Sony y Microsoft incluían el 3D en algunos de sus videojuegos.
El 3D estaba de moda y Nintendo no desaprovechó la ocasión para lanzar una consola que incluyera esta característica. Casi una década después, y con más de 75 millones de unidades vendidas, sus cifras de ventas han quedado claramente por debajo de las que consiguió la Nintendo DS, pero pese a ello no cabe más que calificar sus resultados como ampliamente satisfactorios.
De hecho, las ventas de esta consola ayudaron a mantener a flote al gigante nipón durante los aciagos años de la Wii U. Pero ahora, con el éxito superlativo de la Switch, que va camino de convertirse en una de las consolas más vendidas de la historia, Nintendo ha decidido que ha llegado el momento de poner punto y final a la trayectoria comercial de la veterana 3DS.
Para el recuerdo deja un excelso catálogo de videojuegos como Mario Kart 7, Pokémon Sol y Luna, Animal Crossing: New Leaf, Super Mario 3D Land, Super Smash Bros, Luigi’s Mansion, The Legend of Zelda: Ocarina of Time 3D, Monster Hunter 3 y 4, The Legend of Zelda: A Link Between Worlds o Kirby: Planet Robobot que no se pueden jugar en ningún otro dispositivo. Aun con sus defectos, es una de las consolas que mejores ratos me ha hecho pasar.