A pesar de la multimillonaria inversión que está acometiendo desde hace años y del respaldo incondicional (y no precisamente gratuito) de Nokia, Microsoft no está consiguiendo que los consumidores se interesen por Windows Phone, un sistema operativo que en la inmensa mayoría de mercados ostenta una cuota muy por debajo del 10%.
Pero afortunadamente para los intereses de la multinacional estadounidense, las dificultades que está teniendo para afianzar su sistema operativo en el sector de los smartphones no se están repitiendo con Windows 8 y Windows RT en el campo de los tablets.
Así lo asevera el último informe que ha hecho público la firma Strategy Analytics, en el que se apunta que en los apenas 6 meses que han transcurrido desde el lanzamiento de W8 y RT Microsoft ha conseguido ya un 7,5% del mercado, que traducido en números son 3 millones de tablets vendidos.
Un porcentaje muy significativo que tiene su explicación en el masivo apoyo que dichos sistemas operativos están recibiendo por parte de fabricantes como HP, Dell, Samsung, Asus o Lenovo. Una situación que contrasta, y de qué manera, con la negativa que la mayor parte de estas mismas empresas han mostrado una y otra vez a desarrollar smartphones innovadores basados en Windows Phone 8.
Sea como fuere, y a pesar de los esperanzadores resultados de Microsoft, los sistemas operativos que dominan con absoluta rotundidad el sector de los tablets siguen siendo iOS y Android. Sin ir más lejos, Apple ha vendido en el primer trimestre del año 19,5 millones de iPad y iPad Mini, mientras que los dispositivos Android comercializados han llegado hasta los 17,6 millones de unidades.
Las cifras de ventas de unos y otros son espectaculares, y más que lo van a seguir siendo próximamente, ya que todas las previsiones realizadas hasta la fecha ponen de manifiesto que la popularidad de estos gadgets no hace sino crecer día a día en gran parte del mundo. Buena prueba de ello es que en los 3 primeros meses del año pasado se despacharon 18,7 millones de este tipo de tablets, mientras que en el mismo periodo del 2013 se han vendido 40,6 millones.
Una subida estratosférica del 117% que explica el enorme interés y las gigantescas sumas de dinero que empresas de la talla de Apple, Google y Microsoft, así como los fabricantes con los que trabajan codo con codo, están destinando para mejorar sus productos y conseguir que los consumidores los adquieran en detrimento de las propuestas de sus rivales.