Es sin duda una de las noticias del año. Puede que incluso de los últimos años: Microsoft acaba de hacer pública la compra de la división de dispositivos y servicios de Nokia y un acuerdo para la licencia de sus patentes durante un periodo de 10 años por un montante total de 5.440 millones de euros.
Con esta operación Microsoft pasa a tener control directo sobre el diseño y fabricación de la gama de smartphones de la compañía finlandesa y se asegura su presencia en exclusiva en Windows Phone, poniendo punto y final para siempre a los rumores que apuntaban a un posible desembarco de Nokia en Android.
La compleja integración de ambas compañías, que incluye el trasvase de 32.000 trabajadores de Nokia hacia las filas de Microsoft, no está previsto que se dé por finalizada por completo hasta bien entrado el primer trimestre del año que viene.
Es el último capítulo de una historia que comenzó en febrero del 2011, cuando ambas multinacionales anunciaron un pacto merced al cual Nokia se volcaría en el desarrollo de smartphones impulsados por Windows Phone. Una noticia que generó mucha controversia dado que Stephen Elop, el por entonces recién nombrado CEO de la empresa finlandesa, había sido hasta sólo unos meses antes el máximo responsable de la división de negocios de Microsoft, que engloba a productos como la suite ofimática Office.
Su historial y el hecho de que dejara de lado una plataforma tan potente como Android en favor de un sistema operativo como Windows Phone sin apenas presencia en el mercado levantó ampollas y muy posiblemente lo vuelva a hacer estas próximas semanas puesto que, fruto de esta operación, Elop va a abandonar su puesto en Nokia para volver a su empresa madre y ser nombrado jefe de la división de dispositivos de Microsoft.
¿Y qué sucede con Nokia tras perder su división de dispositivos? Bueno, pues a partir de ahora va a pasar a ser una compañía mucho más pequeña cuyo modelo de negocio dejará de estar enfocado en la fabricación de terminales móviles para centrarse en la lucrativa división de telecomunicaciones Nokia Solutions and Networks (NSN), su servicio de mapas y navegación HERE y la explotación comercial de su amplio catálogo de patentes.
Ericsson, Motorola, Siemens, Palm… ahora Nokia… En sólo unos años los grandes nombres de la telefonía móvil de finales de los ’90 y principios del siglo XXI han sido absorbidos por otras multinacionales, han desaparecido o han reorientado su estructura empresarial hacia nuevos negocios. Mucho me temo que en breve habrá que añadir a esta lista a BlackBerry