Microsoft ha publicado una beta de Windows 11 en su canal para desarrolladores que incluye cambios significativos en el uso de los sensores de presencia y en la que ha añadido un nuevo apartado en el menú de configuración para gestionar las opciones de privacidad en aquellos ordenadores que poseen este tipo de hardware.
La detección de presencia es una función que ofrece la posibilidad a los equipos que incorporan estos sensores de, por ejemplo, activar la pantalla cuando reconocen que alguien está frente al teclado o de apagarla cuando el usuario se va. Ello aumenta la seguridad del dispositivo al tiempo que contribuye a ahorrar batería.
Pero, en esta build de Windows 11, Microsoft ha introducido cambios en las librerías que manejan ese cometido y, por primera vez, ha dado el visto bueno para que todo tipo de programas puedan hacer uso de esa característica. Para hacerlo, eso sí, primero deben informar a los usuarios de ello y recibir la aprobación correspondiente.
De ahí que Microsoft haya implementado una nueva sección en la que se puede autorizar o bloquear el acceso de cualquier aplicación a dichos sensores. Con ello pretende evitar que algunos desarrolladores hagan un uso incorrecto de esta función para recabar información privada de las personas que están tras el teclado.
Tal y como se puede ver en la imagen que hay unas líneas más arriba, en el menú se puede determinar, uno por uno, qué programas pueden hacer uso de esta característica o bien denegárselo a todos en bloque. Para acceder al mismo, hay que ir a Configuración > Sistema > Sensor de presencia.