La aparición del iPad Mini estaba previsto que asestara un duro golpe en la línea de flotación de los tablets de 7 pulgadas impulsados por Android que, con el Nexus 7 y el Kindle Fire HD a la cabeza, están cosechando unas ventas muy interesantes y se han consolidado como una alternativa a tener en cuenta al margen del iPad 3.
Pero la presentación que Apple efectuó el pasado martes no satisfizo las elevadas expectativas que se habían creado las semanas previas y, de hecho, ha acabado generando ciertas dudas entre una parte de sus potenciales compradores, tanto por las características técnicas de este producto como, especialmente, por su precio.
Y es que el iPad Mini, que se pondrá a la venta de manera oficial el próximo viernes 2 de noviembre, va a costar 329 dólares en Estados Unidos, 269 libras en el Reino Unido y entre 313 y 339 euros en el resto de Europa. En España, por ejemplo, el modelo base de 16 GB con Wi-Fi se va a comercializar por 329 euros.
A modo de comparación, Google está vendiendo el Nexus 7 a precio de coste por 199 euros. La misma cantidad que hay que desembolsar para hacerse con el Amazon Kindle Fire HD. Echando cuentas vemos cómo ambos tablets resultan un 60% más baratos que el iPad Mini, una diferencia realmente importante por mucho que el modelo de Apple tenga una pantalla más grande (aunque con peor resolución), un mejor diseño y materiales de mayor calidad.
De hecho, Drew Herdener, un portavoz de Amazon, ha explicado que tras la presentación del iPad Mini han visto cómo las ventas del Kindle Fire HD, lejos de bajar, han crecido significativamente, hasta el punto de que esta ha sido la semana en la que más unidades han despachado.
Es más, Herdener ha comentado que ha sido precisamente este miércoles, 24 horas después de que Tim Cook mostrara al mundo el iPad Mini, el día en el que han conseguido unas ventas más elevadas. Una marca que, eso sí, no ha impedido que el pequeño tablet de Apple haya registrado también unas cifras de reservas récord. Y es que estamos ante un sector en plena efervescencia que no hace sino crecer a un ritmo endiablado.