Google continúa con su expansión internacional y esta pasada semana ha inaugurado sus nuevas y espectaculares instalaciones en Tokio, que se unen a las que ya posee en otras ciudades como Zúrich, Dublín, Tel Aviv o, cómo no, Mountain View.
Situadas en el Distrito de Roppongi, su diseño ha corrido a cargo del estudio Klein Dytham Architecture y combina aspectos de la milenaria tradición japonesa con un toque más moderno, colorido y desenfadado.
En el interior de las oficinas se hallan salas inspiradas en los baños públicos japoneses o en los estanques tradicionales y cuentan con grandes murales que evocan el folclore local y símbolos como el Monte Fuji.
Cada uno de los espacios a disposición de los empleados de la multinacional estadounidense utiliza un color característico asociado al logo de Google.
Tal y como se puede observar en las fotografías que acompañan este artículo, las oficinas son absolutamente espectaculares. Quién pudiera trabajar en un sitio así