Desde que la App Store y Google Play abrieron sus puertas hace poco más de una década, los videojuegos han sido siempre las apps que más ingresos han generado. Un dominio que podría tener los días contados si se confirma el cambio de tendencia de los últimos meses en la tienda de aplicaciones de Apple.
Y es que desde mayo las apps convencionales están superando en ingresos a los videojuegos en la App Store por primera vez. La diferencia es todavía pequeña, de apenas unas décimas, y se fundamenta en la popularidad de servicios como TikTok, Netflix y Tinder.
En lo que llevamos de año, el gasto en aplicaciones generalistas ha crecido al doble de velocidad del que se ha dado en los videojuegos. Tal diferencia se explica por la proliferación de los modelos de suscripción, que se están asentando como la manera preferida por muchos desarrolladores para monetizar sus creaciones.
Pese a la polémica que rodea a algunas de estas suscripciones, los consumidores las están adoptando y los resultados que ofrecen no dejan lugar a dudas acerca de su efectividad para generar entradas masivas de dinero.
De hecho, sólo en el último trimestre ha habido más de 400 apps en la App Store que han superado el millón de dólares en ingresos y 61 han alcanzado los 10 millones apoyándose mayoritariamente en modelos de suscripción.
En Google Play, mientras tanto, los videojuegos siguen siendo los grandes dominadores, hasta el punto de que están detrás del 66% del gasto que realizan los usuarios de dispositivos Android.