Si alguien nos enseñase esta fotografía y nos preguntase dónde creemos que ha sido tomada, es muy posible que asumiésemos que corresponde a una formación rocosa de alguna montaña; puede que alguien respondiese que se asemeja al fondo marino; no sería de extrañar incluso que alguien apuntase que podría ser de tierra removida de un parque o solar. Todas estas respuestas serían erróneas.
La realidad es que esta imagen ha sido tomada en el espacio, a millones de kilómetros de distancia de la Tierra, por la sonda espacial Hayabusa2. La fotografía muestra el aspecto del asteroide 162173 Ryugu, al que esta misión de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) llegó el 27 de junio del 2018 después de casi 4 años de viaje estelar.
Ryugu orbita alrededor del Sol a una distancia de entre 0,96 y 1,41 UA mientras se desplaza a una velocidad de 117.474 Km/s. Su forma se asemeja a la de un diamante, tiene un diámetro aproximado de 850 metros y su masa es de unas 450 millones de toneladas.
Tras tomar muestras, Hayabusa2 inició su viaje de vuelta a la Tierra el 13 de noviembre de 2019, aunque no llegó hasta el 5 de diciembre del 2020, hace apenas un mes. En el tiempo transcurrido desde entonces, JAXA ha confirmado que las minúsculas muestras, de apenas unos gramos, se encuentran en buen estado.
Asimismo, ha señalado que a lo largo de este año las hará llegar a diversos equipos de investigadores de todo el mundo para que las analicen en busca de evidencia molecular que contribuya a entender aún mejor el origen del Sistema Solar.