Las discográficas norteamericanas, agrupadas en torno a la ‘Recording Industry Association of America’ (RIAA), han presentado 784 nuevas demandas contra algunos de los usuarios de los programas P2P KaZaA, LimeWire y Grokster tras considerar que comparten canciones sujetas a derechos de autor. Con éstas son ya más de 10.000 las denuncias que los sellos estadounidense han interpuesto contra quienes usan habitualmente las redes de pares.
Las denuncias abarcan gran parte de los Estados Unidos, al haber ciudadanos acusados en California, Colorado, Georgia, Missouri, Nueva Jersey, Nueva York, Pennsylvania, Virginia y Washington.
Mitch Bainwol, CEO de la RIAA, ha manifestado que «el lunes, la Corte Suprema dio un paso adelante para legitimar los servicios de música online legales». Asimismo, ha declarado que «si había alguna duda, a partir de ahora ya deberían haber quedado disipadas», ya que, según su punto de vista «las personas que descargan música sin permiso de su autor están quebrantando la ley. Nuestros esfuerzos para defender los derechos de los sellos discográficos, músicos y autores dentro de la comunidad musical continuarán con toda seguridad y se verán reforzados en las próximas semanas y meses».
Por su parte, Cary Sherman, presidente de la RIAA, ha expresado que «es ahora más importante que nunca decirles a nuestros fans que hagan las cosas correctas» (en referencia a descargarse música desde tiendas online).
Las demandas llegan sólo unos días después que el Tribunal Supremo de Estados Unidos dictaminara que los grupos y compañías que hay detrás de los programas P2P más conocidos, como es el caso de eMule, BitTorrent o Grokster son responsables de violaciones contra la propiedad intelectual cuando los usuarios que los utilizan copian y comparten música, películas o cualquier otro material sujeto a derechos de autor.