La PlayStation 5 ha sido la consola más vendida del último mes en Europa y Estados Unidos. Además, ha quedado muy cerca de la Switch en Japón, un mercado dominado habitualmente por Nintendo en el que Sony hace más de una década que no consigue replicar el éxito que registra en el resto del mundo.
Unos resultados estos que apuntan a un cambio de tendencia claro después de un periodo de casi cuatro años en el que la Nintendo Switch ha batido récords de ventas y se ha asentado como la tercera consola más exitosa de la historia, sólo por detrás de la PlayStation 2 y la Nintendo DS.
Pero todo hace indicar que estamos viviendo el inicio de una nueva era en el que la dominadora va a ser la PS5. A ello está contribuyendo de manera significativa el fin de la escasez de componentes electrónicos a escala global, que durante casi dos años ha lastrado la capacidad de producción de Sony y le ha impedido fabricar suficientes consolas como para hacer frente a la demanda existente.
Una vez solucionado este problema, las ventas de la PS5 se han disparado. En Europa, por ejemplo, han aumentado un 202% interanual, y en Estados Unidos la consola ha logrado el mejor resultado tanto en unidades vendidas como en ingresos durante un mes de enero.
En ambas regiones, la segunda consola más vendida ha sido la Nintendo Switch, cuyos resultados están experimentando caídas moderadas debido a que buena parte de sus potenciales compradores ya la han adquirido a lo largo de los últimos años y cada vez queda menos gente a quien vendérsela.
En la tercera plaza se ha situado la Xbox Series X/S, que aunque está superando ampliamente los números obtenidos en su momento por la Xbox One, no consigue hacer sombra ni a la Switch ni a la PS5. Algo que, al menos eso espera Microsoft, podría cambiar durante la segunda mitad del año con la llegada de grandes exclusivas como Starfield, Redfall o Forza Motorsport.
FOTOGRAFÍA: CHARLES SIMS