Albert Einstein, el científico más importante del siglo XX y padre, entre otras, de la Teoría de la Relatividad, murió el 18 de abril de 1955 a los 76 años de edad víctima de una insuficiencia cardíaca. Horas más tarde, el fotógrafo Ralph Morse se dirigió al despacho que el genio alemán tenía asignado en la Universidad de Princeton y tomó esta instantánea que refleja el aparente desorden en el que trabajaba la persona que con sus descubrimientos revolucionó la física moderna.