La nebulosa de la Tarántula es una gran nube de gas y plasma situada en la Gran Nube de Magallanes, una galaxia enana que se halla a unos 161.000 años luz de distancia. Descubierta en 1751 por el astrónomo francés Nicolas Louis de Lacaille, debe su nombre a los filamentos luminosos que recuerdan a las patas de una araña.
Se trata de una región gigantesca con una extensión de unos 650 años luz que tiene una tasa de formación estelar muy elevada. En su centro está localizado el supercúmulo estelar R136, que está compuesto por miles de estrellas gigantes y supergigantes como R136a1, una hipergigante azul ultramasiva que se estima que tiene 265 masas solares y una luminosidad 6.200.000 veces mayor que la del Sol.
De hecho, la nebulosa de la Tarántula es la región más luminosa del Grupo Local, el conjunto de galaxias más cercanas a nosotros y del que forma parte la Vía Láctea. Ello ha llevado a que, desde hace años, sea objeto de atención por parte de la comunidad científica y haya sido fotografiada por el telescopio espacial Hubble, el Very Large Telescope o el VISTA, entre otros.
Como no podía ser de otra manera, la NASA ha sacado partido a la entrada en funcionamiento del telescopio espacial James Webb y esta semana ha enfocado sus instrumentos hacia esta nebulosa. El resultado ha sido la esplendorosa imagen que encabeza este artículo.
Tomada con la NIRCam, la cámara infrarroja que equipa este telescopio, muestra una zona de unos 340 años luz en la que se aprecian miles de estrellas que nunca antes habían sido captadas. La zona central, en tonos azulados, es el supercúmulo R136.
Una de las razones que más interés despierta entre los astrónomos sobre la nebulosa de la Tarántula es que tiene un tipo de composición química similar a la de las regiones en las que se formaron estrellas cuando el Universo tenía unos pocos miles de millones de años, de manera que confían en poder sacar partido de las imágenes de esta región para entender mejor el proceso que llevó a la formación estelar a una escala masiva que se produjo en esa época del Cosmos.