A estas alturas es de sobras conocido que desde principios de 2020 existe una escasez global de semiconductores que afecta a industrias tan diversas como la automoción o la electrónica de consumo. El origen de la misma se encuentra en la pandemia que ha bloqueado durante meses multitud de líneas de producción a nivel mundial y en la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
El error que muy a menudo se comete es asumir que la falta de componentes se limita a procesadores y chips gráficos de última generación como los que equipan teléfonos móviles, consolas, tarjetas gráficas, tablets u ordenadores. Y es que, si bien es cierto que la demanda de este tipo de circuitos integrados supera a la oferta disponible, no son los únicos que escasean.
Tanto es así que el CEO de TSMC, el mayor fabricante mundial de semiconductores, ha lanzado la voz de alarma advirtiendo que la escasez de chips muy baratos, que en algunos casos apenas cuestan unos céntimos, está limitando la producción de sistemas de litografía ultravioleta extrema que cuestan más de cien millones de euros y que se necesitan para la fabricación de los SoC que utilizan, entre otras, Apple, Samsung, AMD o Intel.
El ejecutivo taiwanés ha ido más allá y ha indicado que, en estos momentos, la falta de unos chips de radio que tienen un precio de apenas 50 céntimos está condicionando la fabricación de coches que en algunos casos se venden por más de 50.000 euros.
Los automóviles, ha añadido, utilizan de media un 15% más de circuitos integrados cada año, mientras que los teléfonos móviles incluyen actualmente entre el doble y el triple de chips respecto a cinco años atrás. Ello está provocando que las empresas de estos sectores estén teniendo dificultades para conseguir todos los componentes electrónicos que necesitan.
A tal efecto, ha subrayado que TSMC está construyendo nuevas plantas para la fabricación de chips de bajo coste ya que las instalaciones que posee desde hace décadas no pueden hacer frente a la demanda actual. Ello probablemente implique que el precio de estos componentes suba en los próximos meses.
Según el CEO de TSMC, entre finales de este año y principios del que viene esta crisis debería empezar a dar síntomas de mejora, pero ha añadido que no puede afirmar que eso vaya a suceder con seguridad debido a la gran demanda que todavía existe de determinados componentes.
FOTOGRAFÍA: VISHNU MOHANAN