Hace un par de semanas os mostré unas cuantas imágenes de la mayor colección privada de videojuegos que había visto hasta la fecha. Multitud de consolas, periféricos, cintas, cartuchos, CD’s y DVD’s que un apasionado de este mundillo había recopilado durante -supongo- años y años.
A decir verdad, pensaba que tardaría mucho tiempo en encontrar algo siquiera parecido, pero el mundo es muy grande y hay gente con unos gustos y fobias muy particulares.
Sólo así se explica que un tipo, que por cierto quiere mantener el anonimato, haya dedicado los últimos 16 años de su vida a dar forma a una colección de proporciones astronómicas. Atención a las fotos: