Un aficionado a la robótica ha construido una réplica robótica de Wall-E, el pequeño héroe de la espléndida película de animación que Pixar estrenó en el 2008, capaz de contestar a ciertas preguntas preprogramadas, de desplazarse hacia adelante, atrás y los costados e incluso de reconocer comandos de voz y actuar en consecuencia:
El robot incorpora una cámara en uno de sus ojos que le permite discernir unos objetos de otros y seguirlos cuando estos se mueven gracias a la ayuda de unos servos, que también le ayudan a mover sus brazos. El conjunto, que funciona con 4 pilas de 1,5V, incluye un jostick desde el que se puede controlar a este particular Wall-E y guiarlo en la dirección deseada en caso de que sea necesario.