La época en que podíamos conseguir SSD de última generación con suculentos descuentos tiene los días contados. La crisis que durante los dos últimos años ha afectado al sector tecnológico está llegando a su fin y, con ello, también la necesidad de los fabricantes de rebajar sus productos para poder venderlos.
En el caso de las unidades de almacenamiento, todo hace indicar que los precios van a dispararse en 2024. En el último informe que ha publicado TrendForce, por ejemplo, se subraya que el coste de la memoria NAND va a aumentar hasta en un 50% en los próximos meses, lo cual se va a traducir en un incremento similar de los SSD.
Se estima que Samsung, SK Hynix y Micron, los tres principales productores de este tipo de dispositivos a nivel mundial, necesitarán que el precio de los discos SSD crezca al menos un 40% para dejar de perder dinero. Ello es debido a las rebajas tan agresivas que se han visto obligadas a llevar a cabo desde 2021 y que, unidas al descenso en sus ventas, los han llevado a perder miles de millones anuales.
La tendencia creciente ya ha comenzado. Desde el mes de julio, el precio de algunos modelos de SSD ha aumentado en torno a un 30%, lo que unido al 50% adicional que se espera de cara a los próximos meses, puede hacer que a mediados de 2024 tengamos que pagar casi el doble que un año atrás para hacernos con uno de estos productos. Así las cosas, parece que, a no mucho tardar, será difícil volver a encontrar SSD de 1 TB que sean relativamente modernos por debajo de 100 euros.
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