El Gran Colisionador de Hadrones es el acelerador de partículas más grande y energético del mundo. Situado en el CERN, cerca de Ginebra, ha sido diseñado para hacer colisionar haces de protones de hasta 7 TeV de energía en su túnel de 27 kilómetros de circunferencia y examinar la validez y límites del Modelo Estándar.
En su construcción, que ha tenido un coste estimado de 2.300 millones de euros, han intervenido más de 2.000 físicos procedentes de universidades y laboratorios de 34 países. Uno de ellos, Sergio Cittolin, no sólo ha aportado sus conocimientos en la materia, sino que en su tiempo libre se ha dedicado a crear dibujos del Gran Colisionador de Hadrones con un estilo extremadamente similar al que Leonardo da Vinci otorgaba a algunas de sus obras.
Si os fijáis bien veréis que las notas que se incluyen en los bocetos están redactadas usando la escritura especular. Es decir, están escritas en la dirección opuesta a la normal, tal y como hacía habitualmente el genio italiano del Renacimiento.