El jardín de las palabras (Koto no ha no Niwa en japonés) es la última película de animación del director japonés Makoto Shinkai. Estrenada el pasado 31 de mayo, narra la historia de Takao Akizuki, un estudiante de 15 años que vive en compañía de su madre y hermano mayor y que desea convertirse en diseñador de zapatos.
Pero más allá de la historia en sí, lo que llama la atención de este largometraje es el descomunal grado de detalle de las imágenes que aparecen en pantalla, hasta el punto de que en ocasiones el espectador tiene la sensación de estar contemplando escenarios reales.
No es casualidad. Los decorados en los que se desarrolla la acción están basados en fotografías tomadas en el Jardín Nacional Shinjuku Gyoen, un jardín botánico de 58,3 hectáreas situado en el barrio tokiota del mismo nombre, que los artistas que han trabajado en el film han plasmado en la gran pantalla con una verosimilitud excepcional.
Muestra de ello son las imágenes compuestas que acompañan este artículo. En las mismas se comparan fotogramas extraídos del film con los escenarios reales en que están basados.
Tal y como puedes observar, en ocasiones cuesta de discernir entre unos y otros.