Aunque el Apple Watch no se pondrá a la venta hasta el 24 de abril, en China ya se han empezado a comercializar copias pirata de este reloj inteligente que plagian sin miramientos su diseño pero que, como cabría esperar, son mucho más baratas. Algunos modelos se pueden conseguir por unos 35 euros al cambio.
El aspecto exterior es lo único que comparten con el Apple Watch. Y es que como su precio pone de manifiesto, a nivel de características técnicas, funcionalidades, lista de apps disponibles, materiales o acabados se sitúan muy por detrás de los que exhibe el nuevo producto de la compañía estadounidense.
Como se puede comprobar en las imágenes que he incluido en el artículo, el parecido que algunos de estos relojes «inteligentes» guardan con el original de Apple es asombroso: tanto la forma y tamaño de la caja, como la posición de los botones de control (incluida la corona digital) e incluso los colores de las correas son casi idénticos.
Eso sí, no esperes encontrarte nunca con uno de estos smartwatches en los aparadores de una tienda cercana a tu domicilio, ya que la legislación en materia de propiedad intelectual y contra la piratería industrial imposibilitan su venta legal en ningún país occidental. De hecho, si alguno de estos fabricantes intentase distribuirlos en Europa o América, con toda probabilidad tendría que hacer frente a demandas millonarias por parte de Apple.