Copio y pego el artículo que nos acaba de enviar un usuario de Abadía:
«Existe un pacto entre diferentes compañías proveedoras de servicios ADSL para marear a los clientes que solicitan la baja para irse a otro operador.
En base a ese acuerdo se retrasan las bajas hasta los dos meses, tiempo en el que esperan que por cansancio o desesperación el abonado reconsidere su decisión y «vuelva» con su antiguo operador.
Es una práctica habitual que hasta ahora muchos sospechábamos, pero que por arte de birbiloque ahora está investigando la CMT para ver si así sus principales cargos se ganan los enormes sueldos que cobran.»
La situación de indefensión en que nos encontramos ante los abusos de determinadas operadoras de banda ancha clama al cielo. De hecho, son pocos los afortunados que no conocen a algún familiar o amigo que haya sufrido las consecuencias del -por lo general- pésimo servicio de atención al cliente de estas compañías.
Aún así, quiero recalcar que no existe ningún tipo de confirmación oficial acerca de la información que acabo de copiar, por lo que mientras la CMT no se pronuncie al respecto -si es que lo llega a hacer- habrá que tomarla con alfileres.