A última hora del día de ayer, Apple dio a conocer sus resultados económicos del último trimestre del año y, como viene siendo norma habitual en la casa desde hace casi una década, estos superaron las expectativas más optimistas que habían realizado previamente los analistas.
Tras vender 37,04 millones de iPhones, 15,43 millones de iPads, 15,4 millones de iPods y 5,2 millones de Macs, la compañía anunció que había obtenido unos ingresos récord de 46.330 millones de dólares y unos espectaculares beneficios de 13.060 millones de dólares, al tiempo que explicaba que para el trimestre en curso esperaba unos ingresos de 32.500 millones de dólares.
Una vez se conocieron las ganancias de Apple, sus acciones subieron un 7,99% tras el cierre del mercado y, cuando vuelva a abrir Wall Street, se espera que su capitalización bursátil alcance nuevos máximos históricos y supere holgadamente la barrera de los 400.000 millones de dólares, a la que llegó de manera puntual la semana pasada durante sólo unas horas.
Para que nos hagamos una idea más precisa de la magnitud de esta cifra, baste con señalar que es mayor que el Producto Interior Bruto (PIB) de Grecia, que en el 2011 fue de 305.415 millones de dólares.
También es superior al PIB de países como Dinamarca (310.760 millones de dólares), Chile (243.049 millones de dólares), Finlandia (239.232 millones de dólares), Filipinas (216.096 millones de dólares) Rumanía (185.315 millones de dólares), Perú (168.459 millones de dólares), Nueva Zelanda (140.434 millones de dólares) o Marruecos (100.323 millones de dólares). Impresionante, ¿no os parece?