Aunque a alguno pueda sonarle a broma, no lo es. La mayor tienda de Internet ha presentado hace unas horas un proyecto futurista en el que lleva tiempo trabajando su equipo de I+D y con el que quiere agilizar sobremanera la entrega de los pedidos que realicen sus clientes. Su nombre: Amazon Prime Air.
¿Cómo pretende hacerlo? Sustituyendo a los transportistas tradicionales por un ejército de pequeños drones no tripulados que se encarguen de distribuir los paquetes y ponerlos en las manos de sus compradores en un periodo máximo de 30 minutos.
Suena a ciencia ficción, pero Amazon asegura que dispondrá de la tecnología necesaria para implementar un servicio tan complejo como éste muy pronto. De hecho, afirma que lo pondrá en marcha a nivel comercial en cuanto la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos apruebe un nuevo marco legislativo que regule los vuelos de los vehículos no tripulados.
¿Cuándo podría ser eso? Pues si se cumplen los plazos previstos, Amazon espera empezar a ofrecer este servicio premium durante el año 2015. Debo admitir que ahora mismo estoy con la boca abierta