El Parlamento Europeo ha decidido hoy rechazar por aplastante mayoría (648 votos a favor, 14 en contra y 18 abstenciones) la directiva sobre la patentabilidad del software. Se trata de una gran victoria para todos aquellos que han puesto todo de su parte para lograr que la ciudadanía europea, y los políticos en particular, comprendiesen que la innovación y la competitividad del sector de las nuevas tecnologías pasaba en gran medida por rechazar la llegada de las patentes de software a Europa.
Michel Rocard, ponente del informe parlamentario del grupo socialista europeo, ya manifestó antes de llevarse a cabo la votación que «en el Parlamento Europeo compartimos una cólera colectiva sobre la forma inadmisible en que ha sido tratado -el tema de las patentes de software- por la Comisión y el Consejo debido a la ausencia total de consulta a la hora de redactar el texto», por lo que en su opinión había que «rechazar esta directiva como un mensaje a la Oficina de Patentes».
Se ha evitado así que las grandes multinacionales se impusieran sobre el tejido industrial europeo, formado mayoritariamente por pequeñas y medianas empresas.
Por su parte, Jonas Maebe, miembro de la FFII, ha expresado su satisfacción por el resultado de la votación, ya que «el resultado muestra claramente que un minucioso análisis y una información precisa tienen más impacto que lo que puedan hacer lobbies ocultos y amenazas externas. Espero que lo sucedido hoy pueda retornar a algunas personas la fe en las decisiones que adopten las instituciones europeas. Espero también que animará al Consejo y a la Comisión a emular al Parlamento Europeo para mejorar la transparencia».