Apenas quince segundos. Es el tiempo que transcurre desde que el conductor del coche que aparece en el vídeo sale del garaje hasta que un tornado que se dirigía hacia esa posición se topa en su camino con el edificio y lo reduce a escombros. Estas impactantes imágenes fueron grabadas en la república rusa de Baskortostán con una cámara instalada en el parabrisas del automóvil: