Samsung ha iniciado esta semana la comercialización de la nueva generación de tablets Galaxy Tab S. La gama está compuesta por dos modelos de 8,4 y 10,5 pulgadas que destacan por su atractivo diseño, finura, reducido peso y por incorporar una pantalla con tecnología Super AMOLED capaz de reproducir contenidos a una resolución de 2560 x 1600 píxeles.
Con este lanzamiento, Samsung ha completado la renovación de su oferta de tablets. El catálogo a disposición de los consumidores es amplísimo y ofrece opciones para todos los gustos, tanto por lo que hace referencia a la variedad de dispositivos como por la diversidad de tamaños, diseños y precios entre los que se puede elegir.
Charlando con amigos me he encontrado con que el gran número de modelos disponibles provoca que en ocasiones no sepan cuál es el que se adapta mejor a sus necesidades específicas, ya sea por características técnicas, ergonomía o presupuesto. Así pues, voy a aprovechar los próximos párrafos para describir a grandes rasgos las particularidades de las principales familias de tablets de Samsung.
Empezaré por el Galaxy Tab 4, una línea de tablets de gama media que se comercializa en tres tamaños de 8,4 pulgadas, 10,1 pulgadas y 12,2 pulgadas y que va destinada a todas aquellas personas que quieren disfrutar de las bondades de este tipo de dispositivos a un precio razonable.
Dispone de una pantalla con una resolución de 1280 x 720 píxeles, un procesador de cuatro núcleos a 1,2 GHz, 16 GB de almacenamiento interno, 1,5 GB de RAM, una cámara trasera de 3 megapíxeles, otra frontal de 1,3 megapíxeles y funciona bajo el sistema operativo Android KitKat 4.4.
De mayores prestaciones y diseño más estilizado es la línea Samsung Galaxy Tab S. Tal y como he señalado unas líneas más arriba, está compuesta por dos modelos de 8,4 y 10,5 pulgadas que cuentan con una pantalla de resolución más elevada, un procesador más potente, más memoria RAM y unas cámaras delantera y trasera más avanzadas.
Tanto la línea Galaxy Tab 4 como la Galaxy Tab S están destinadas a un público que utiliza los tablets para acceder a contenidos multimedia como películas, series, vídeos de YouTube, para navegar por Internet o para ejecutir apps que les permitan consultar el correo y actualizar el perfil de Facebook o Twitter.
A un tipo de cliente muy diferente están enfocadas las familias Galaxy Tab PRO y Galaxy Tab NotePRO. Han sido creadas para satisfacer las necesidades de los profesionales, de manera que por funcionalidades y prestaciones se sitúan a medio camino entre un tablet y un ordenador portátil.
Están enfocadas a mejorar las actividades multitarea y la productividad de sus poseedores, de ahí que, por ejemplo, permitan tener hasta cuatro ventanas abiertas a la vez e incluyan un organizador personal con el que hacer más eficientes las reuniones de negocios. En el caso del NotePRO, viene de serie además con un bolígrafo S Pen que permite tomar notas sin tener que teclear sobre la pantalla.
Como se puede ver, la variedad de tablets que ofrece Samsung es muy amplia. Tanto que a veces es posible incluso que uno no sepa cuál es el modelo más indicado para el uso que le va a dar. Si te encontrabas en esa situación, espero que este artículo haya servido para que te formes una idea más clara y precisa acerca de las características técnicas y particularidades de las distintas familias de tablets que comercializa Samsung.