Hace 25 años, Nintendo lanzó la Game Boy, una consola que redifinió la industria del entretenimiento con sus multimillonarias ventas, dio pie a la popularización de los sistemas de videojuegos portátiles y permitió que toda una generación de niños y adolescentes descubrieran en su pequeña pantalla monocromo de 2,6 pulgadas títulos como Tetris, Super Mario Land o Pokémon Rojo y Azul.
Su icónico diseño resulta extremadamente familiar para cualquiera que haya crecido durante la década de los ’90, en la que además de la Game Boy original se comercializaron otras variantes con unas formas muy similares como la Game Boy Pocket o la Game Boy Color.
Pero, ¿y si le enseñásemos por primera vez una Game Boy a niños de entre 6 y 12 años? ¿Qué reacción tendrían? ¿Sabrían de qué se trata? ¿Qué opinarían de su tamaño y peso? ¿Y de su diseño? ¿Mostrarían sorpresa al ver el aspecto pixelado y en blanco y negro de sus videojuegos?
A estas y otras cuestiones similares da respuesta este fantástico vídeo realizado por TheFineBros, en el que se pueden observar las caras de sorpresa de unos niños cuando les entregan una Game Boy y les preguntan si saben de qué se trata. Las respuestas que dan algunos son para enmarcar (el vídeo está en inglés pero las expresivas reacciones de los peques creo que no precisan de traducción alguna)