La mala fortuna de un niño que visitaba el Zoo de San Francisco en compañía de sus padres dio lugar a esta imagen impagable. El hecho ocurrió cuando al pequeño se le cayó la Nintendo DSi XL que llevaba consigo en el recinto de los gorilas. Un ejemplar de considerable tamaño que observó lo sucedido se aproximó acto seguido a la consola y empezó a mirarla con curiosidad.
Poco después, una cría se acercó también a indagar y solicitó su turno para mirar de cerca el extraño objeto que tenía frente a sus ojos. No lo consiguió. El primate más grande no quiso dejársela siquiera un momento. Quién sabe, puede que estuviera jugando al Donkey Kong
La escena fue captada por una fotógrafa que casualmente se encontraba a unos metros de distancia cuando la portátil de Nintendo acabó en las manos de los gorilas.