Operarios de una empresa petrolera canadiense han hallado inesperadamente cerca de la pequeña localidad de Spirit River, en la provincia de Alberta, un enorme fósil de dinosaurio enterrado en el terreno por el que pretendían hacer pasar su red de distribución de crudo.
Expertos del Museo Tyrrell y del National Geographic que se han personado en el lugar tras ser alertados por los representantes de la compañía consideran, tras analizar los restos, que se trata de uno de los hallazgos más importantes en mucho tiemo en esta región de América del Norte.
El fósil, de 3 metros de longitud, contiene la cola completa de un hadrosáurido que pudo medir entre 10 y 15 metros. Estos dinosaurios herbívoros, que fueron muy abundantes al final del Cretácico, se caracterizaban por tener hocicos terminados en un pico achatado semejante al de los patos actuales.
En las próximas semanas, los paleontólogos que se han hecho cargo del caso intentarán desenterrar cuidadosamente los restos y llevarlos a la Universidad de Alberta o al Museo Tyrrell para que sean estudiados y más tarde expuestos al público.