Todos hemos visto vídeos de explosiones atómicas en los que aparecen los tan temidos hongos nucleares elevándose varios kilómetros sobre el nivel del suelo. Pero si bien existen muchas grabaciones de este tipo circulando por Internet, pocas, muy pocas, contienen el sonido auténtico, crudo y original que produce una detonación nuclear, sin efectos añadidos a posteriori en la sala de mezclas para hacerlo más espectacular. Ésta es una ellas:
La explosión que aparece en las imágenes corresponde al primero de los 11 tests nucleares que el ejército estadounidense llevó a cabo en 1953 en el Emplazamiento de Pruebas de Nevada, una reserva de 3.500 Km2 de terreno desértico y montañoso situada en el condado de Nye, Nevada, a unos 105 Km de la ciudad de Las Vegas.
La bomba, conocida con el nombre de Annie, liberó una energía equivalente a 16 kilotones. Si te fijas verás que desde que se observa la explosión hasta que llega el sonido pasan 32 segundos, lo que indica que la cámara se situó a aproximadamente 11 Km del punto en el que se produjo el estallido. Si a esa distancia el sonido se escuchó con tal intensidad, imagina cómo debió ser en la zona cero