El iMac G4, conocido popularmente con el nombre de lamparita por su gran parecido con Luxo, la mascota de Píxar, es probablemente uno de los ordenadores más bonitos que se han creado jamás. Lanzado en enero del 2002, tuvo una vida comercial muy corta, ya que en agosto del 2004 Apple lo sustituyó por el iMac G5, un modelo mucho más avanzado técnicamente y dotado también de un diseño sobrio y elegante que, sin embargo, no desprendía la magia de su antecesor.
El procesador PowerPC de 800 MHz, los 256 MB de RAM y la tarjeta gráfica nVidia GeForce 2 MX del iMac G4 original no permite ejecutar Mac OS X Lion ni los programas de retoque fotográfico actuales, pero ello no quiere decir que no se le pueda seguir sacando partido hoy en día. Eso sí, para conseguirlo hace falta echarle un poquito de imaginación y ser un poquito manitas.
Como ha hecho por ejemplo este seguidor de Apple, que ha cogido su viejo iMac G4, le ha quitado la pantalla LCD que incorporaba y en su lugar ha colocado un nuevo y flamante iPad de tercera generación, consiguiendo de esta manera el soporte más bonito que he visto para tablet alguno.