Desde el 10 de diciembre está a la venta en Japón el Circle Pad Pro, un accesorio de diseño más que discutible que añade a la Nintendo 3DS un segundo stick analógico y dos gatillos adicionales, botones estos muy útiles para sacar el máximo partido a determinados juegos.
Aunque el lanzamiento generó inicialmente muchas críticas y alguna que otra burla debido a sus horrendas formas, lo cierto es que se está vendiendo muy bien, en buena parte porque el Monster Hunter Tri G es compatible con el mismo.
Claro que hay quien, tras comprarlo, no ha quedado excesivamente satisfecho con su funcionamiento. Tal es el caso del protagonista del siguiente vídeo, que ha decidido modificarlo e insertarle un mando de PlayStation, con el que ha conseguido jugar precisamente al Monster Hunter Tri G:
En Nintendo deben estar contentos con este fenómeno