El jueves pasado, a eso de las 16:50 horas, el Discovery partió desde Cabo Cañaveral (Florida) rumbo a la Estación Espacial Internacional con 6 astronautas estadounidenses, el Módulo Multipropósito Permanente Leonardo, el androide Robonaut 2 y el ELC-4 a bordo en la que es su 39ª y última misión espacial, dado que cuando regrese a la Tierra la NASA lo cederá al Museo del Aire y el Espacio del Instituto Smithsoniano para que sea expuesto de forma permanente junto con otras lanzaderas.
La diosa fortuna quiso que sólo unos minutos antes de su lanzamiento un avión comercial que iba con retraso despegara finalmente desde Orlando, lo que propició que poco después sus pasajeros tuvieran la oportunidad de contemplar desde el aire su meteórica ascensión. Uno de ellos grabó el acontecimiento en vídeo: