El 6 de enero del 2005, el Korea Advanced Institute of Science and Technology (KAIST) presentó el HUBO, un robot con aspecto humanoide de 1,25 metros de altura y 56 Kg de peso que podía desplazarse a una velocidad de hasta 1,25 Km/h y funcionar ininterrumpidamente durante 1 hora.
En noviembre de ese mismo año, científicos del KAIST, en colaboración con la empresa norteamericana Hanson Robotics, desarrollaron una versión mejorada de este robot. El prototipo era algo más alto y pesado que su predecesor, funcionaba bajo Windows XP y contaba con una característica que lo hacía único: su rostro cibernético había sido sustituido por otro que simulaba las facciones de Albert Einstein:
Sus creadores lo bautizaron con el nombre de Albert HUBO. ¿Lógico, no?