El acuerdo de colaboración al que han llegado Microsoft y Yahoo para que ésta última sustituya su buscador por el de la compañía de Redmond ha hecho correr ríos de tinta en la última semana. Con esta alianza pretenden plantar cara a Google, que acapara más del 65% de las búsquedas globales y, tanto o más importante, se ha convertido en la primera empresa publicitaria del mundo.
Pero, ¿servirá este pacto para cambiar las tornas y desbancar a Google de su posición de privilegio? Al contrario de lo que han declarado Steve Ballmer y Carol Bartz, artífices últimos del pacto entre una y otra compañía, muchos siguen pensando que no. Motivos no les faltan:
Traducción de andar por casa:
-¿Alguna información acerca de cómo afectará la fusión entre Microsoft y Yahoo a los hábitos de búsqueda?
-Espera que lo busque en Google