El culebrón en el que se ha convertido la oferta de compra que Microsoft presentó en enero del año pasado para hacerse con Activision Blizzard está dando sus últimos coletazos. Hace unos minutos se ha sabido que, una vez obtenidos los vistos buenos de los organismos reguladores de la competencia europeos y estadounidenses, la multinacional del software tiene previsto cerrar la operación la semana que viene.
De acuerdo a la información a la que ha tenido acceso The Verge, Microsoft tiene en el punto de mira anunciar el próximo viernes, día 13 de octubre, la compra formal de Activision Blizzard. La fecha podría sufrir ligeras variaciones en caso de que la autoridad de la competencia británica demorase la publicación de su fallo en relación a este caso, que si no se produce una sorpresa mayúscula será también favorable a la adquisición.
La compra pondrá fin a un serial que se ha alargado 20 meses, que ha estado cargado de batallas judiciales y regulatorias y en el que no han faltado cambios de guión inesperados. Figuras claves de la industria se han pronunciado al respecto y en las negociaciones que han conducido a su resolución han intervenido, de una manera u otra, empresas del calibre de Nintendo, Sony, Nvidia o Ubisoft.
Una vez se rubrique el acuerdo, Microsoft habrá efectuado la mayor compra de la historia del sector de los videojuegos después de pagar 68.700 millones de dólares por Activision Blizzard. Una cantidad que le va a permitir controlar franquicias clave como Diablo, StarCraft, World of Warcraft, Overwatch, Candy Crush Saga, Crash Bandicoot, Guitar Hero, Spyro, Tony Hawk y, por encima de todo, Call of Duty.