Microsoft va a llevar a cabo una reestructuración de su plantilla que va a conllevar el despido de 10.000 trabajadores para compensar la reducción de ingresos que está experimentando por la problemática situación económica que se vive en amplias regiones del mundo y la amenaza latente de una recesión global en los próximos meses.
Satya Nadella, CEO de la compañía estadounidense, ha explicado que a partir de ahora van a centrar sus esfuerzos en áreas que consideran estratégicas para el futuro de la compañía, como la Inteligencia Artificial, a la que asignarán recursos económicos y humanos extra para aumentar el desarrollo de tecnologías innovadoras.
Nadella ha señalado que, desde el día de hoy, y hasta el próximo 31 de marzo, se van a poner en contacto con los profesionales afectados para comunicarles el cese de sus funciones. Al mismo tiempo, ha indicado que, a pesar de que 10.000 es una cifra muy elevada, equivale únicamente al 5% de la masa laboral total de Microsoft, que actualmente está compuesta por unos 220.000 empleados.
Esta ronda de despidos se une a la que ya llevó a cabo el gigante norteamericano durante el verano, cuando prescindió de los servicios de otros 1.000 empleados y, ya por entonces, anunció que iba a reducir de manera significativa las contrataciones a corto y medio plazo.