Los precios de los teléfonos móviles de gama alta, y de los iPhone en particular, se han disparado en los últimos años, en los que han crecido muy por encima de la inflación. Basta con echar la vista atrás para ver cómo en 2017 Apple lanzó el iPhone 8 por 809 euros, mientras que ahora hay que desembolsar 1319 euros para hacerse con un iPhone 14 Pro. O lo que es lo mismo, un 63% más.
Esta escalada de precios ha provocado que cada vez haya que destinar una parte mayor del salario medio para comprar un iPhone, un Samsung Galaxy S o cualquier otro smartphone de los llamados avanzados.
Esta problemática aparece reflejada en toda su crudeza en la siguiente gráfica, en la que se puede comprobar el porcentaje del salario anual que deben dedicar los ciudadanos de cada país para comprar un iPhone 14. Algunos de los casos son verdaderamente llamativos:
Tal y como se puede apreciar, una persona que viva en Nigeria y tenga un sueldo promedio debe ahorrar el 69,2% de su salario anual para poderse permitir un iPhone 14. En India es un 42,18%, en Perú un 29,43%, en Brasil un 28,12%, en Colombia un 25,60%, en México un 18,64%, en Uruguay un 15,43%, en China un 12,71%, en Chile un 11,40%, en España un 4,97%, en el Reino Unido un 2,99%, en Japón un 2,96%, en Alemania un 2,89% y en Estados Unidos un 1,84%.
