El nuevo iPhone 6s es ya una realidad. En un acto celebrado en el Auditorio Bill Graham de San Francisco, Apple ha presentado la nueva generación de su dispositivo estrella, el que más ingresos y beneficios le reporta y sobre el que ha edificado su imperio económico.
Las múltiples filtraciones que se habían producido en los últimos meses han dejado espacio para pocas sorpresas. Tal y como se daba por descontado, comparte diseño con el iPhone 6 pero incorpora mejoras técnicas muy apreciables en algunos aspectos.
Así, el nuevo iPhone 6s está impulsado por un SoC A9 con arquitectura de 64 bits que incluye un coprocesador de movimiento M9. Todavía no se han publicado benchmarks independientes que reflejen el rendimiento de este chip, pero Apple señala que mejora el rendimiento de la CPU en un 70% con respecto a la generación anterior y su potencia gráfica en hasta un 90%.
Fiel a su política de no detallar determinadas características técnicas de sus dispositivos, Apple no ha hecho púlbica la RAM que incorpora el iPhone 6s. Si sigue teniendo 1 GB de RAM como el iPhone 6 o, por contra, incluye 2 GB es en estos momentos todo un misterio que no se resolverá hasta que se empiece a distribuir y tengamos acceso a los primeros análisis.
La pantalla de 4,7 pulgadas del iPhone 6s sigue exhibiendo una resolución de solo 1334×750 píxeles, un dato realmente decepcionante puesto que implica que sigue teniendo la misma densidad de píxeles por pulgada (326 ppi) del iPhone 4 que salió en 2010.
En una época en la que los smartphones de gama alta como el Samsung Galaxy S6, el LG G4 o el Moto X Style disponen de resoluciones Quad HD e incluso algunos modelos como el Sony Xperia Z5 Premium tienen pantallas 4K, resulta decepcionante que Apple siga ofreciendo una resolución tan baja.
Otro capítulo que va a dar que hablar es la escasa capacidad de almacenamiento del modelo base del iPhone 6s: únicamente 16 GB. Se había especulado con que este año Apple iba a aumentarla hasta los 32 GB como han hecho la práctica totalidad de sus competidores, pero no ha sido así. En una decisión que seguro va a traer cola, la compañía estadounidense ha optado por maximizar los beneficios que obtiene con cada unidad del iPhone 6s y va a seguir ofreciendo 16 GB.
Si la innovación más destacada del iPhone 4s fue el asistente personal Siri y la del iPhone 5s fue el sistema de reconocimiento de huellas dactilares Touch ID, la novedad más llamativa del iPhone 6s lleva por nombre 3D Touch. Se trata de una tecnología que detecta la intensidad con la que se presiona la pantalla y permite interactuar con las aplicaciones y servicios en función de la fuerza que se ejerza.
Por ejemplo: si presionamos ligeramente un correo podremos leerlo por encima pero si lo hacemos con firmeza iOS 9 nos mostrará el contenido completo del mismo. De la misma manera, si presionamos levemente sobre un enlace el sistema nos mostrará la web en primer plano como si la abriéramos de manera normal, pero la cerrará automáticamente en cuanto dejemos de presionar. Si, en cambio, lo que queremos es acceder a dicha web como siempre, bastará con presionar sobre el link con algo más de firmeza.
Quienes han asistido al acto de presentación de Apple y han tenido la oportunidad de probar 3D Touch señalan que tiene un potencial enorme. No me cabe la menor duda de que los desarrolladores van a sacar partido de las posibilidades que ofrece para crear mejores aplicaciones que ofrezcan nuevas vías de interacción con sus usuarios.
Las cámaras del iPhone 6s también han recibido grandes mejoras. La cámara principal iSight incorpora un nuevo procesador de señal de imagen, un mejor sistema de mapeo de tonos, una apertura de f/2,2 y permite hacer fotografías de hasta 12 megapíxeles.
Sigue sin disponer, en cambio, de estabilizador óptico de imagen, característica ésta reservada para el iPhone 6s Plus, pero las mejoras incorporadas permiten, por primera vez en un iPhone, grabar vídeos en 4K a 30 fps (fotogramas por segundo). En 1080p los vídeos son de 30 ó 60 fps y en 720p de 30 fps.
Mientras tanto, la cámara frontal FaceTime HD es de 5 megapíxeles, incluye flash y dispone de un sistema de reconocimiento facial que enfoca automáticamente las caras cuando se realiza una fotografía.
Aunque el diseño del iPhone 6s es esencialmente el mismo del iPhone 6, conviene señalar que sus dimensiones varían ligeramente. Sus medidas son de 138,3 x 67,1 x 7,1 milímetros, mientras que en su predecesor son de 138,1 x 67 x 6,9 milímetros. Como se puede apreciar, el nuevo modelo es un poquito más largo, ancho y grueso.
Su peso también ha aumentado desde los 129 gramos del iPhone 6 hasta los 143 gramos del iPhone 6s. La causa es que la carcasa del iPhone 6s está realizada con una aleación de aluminio serie 7000, más resistente pero también un poquito más pesado.
El iPhone 6s se va a poner a la venta el 25 de septiembre en acabados gris espacial, plata, oro y oro rosa en Alemania, Australia, Canadá, China, Estados Unidos, Francia, Hong Kong, Puerto Rico y Reino Unido. Más adelante, en fechas todavía por determinar, se comercializará en otros países. Apple ha querido remarcar al respecto que antes de que acabe el año estará disponible en 130 países.