El Ministerio de Industria va a obligar a las operadoras de telefonía fija, de móviles y de Internet a que informen públicamente cada 3 meses de diferentes parámetros con los que será posible comprobar la calidad del servicio que ofrecen.
En cuanto se publique en el BOE, las compañías tendrán la obligación de poner a disposición de los usuarios el tiempo que tardan en responder cuando reciben una consulta sobre asuntos administrativos o de facturación, la frecuencia de reclamaciones de sus clientes y el periodo que pasa hasta que las solucionan. Por último, también deberán hacer constar los problemas ligados a los procedimientos de portabilidad de números telefónicos.
En el caso de las operadoras de telefonía móvil, se publicarán además las llamadas fallidas y las llamadas interrumpidas de sus clientes.
Por lo que hace referencia a las empresas que ofrecen servicios de banda ancha en Internet, a partir del año que viene tendrán la obligación de hacer constar la proporción de intentos de conexión con éxito, la velocidad de transmisión media que consiguen sus usuarios cuando descargan ficheros y el porcentaje de transmisiones fallidas.