Google ha pagado en la última década unos 100 millones de dólares anuales a la Fundación Mozilla a cambio de ser el motor de búsqueda predeterminado de Firefox. La cifra es astronómica y ha convertido a la empresa californiana en la principal benefactora de esta organización sin ánimo de lucro que desarrolla el segundo navegador más utilizado de Internet.
Pero esta relación que se remontaba al año 2004 ha llegado a su fin. Así lo ha confirmado Mozilla en un comunicado, en el que señala que el contrato con Google no ha sido renovado y que las versiones de Firefox que salgan de ahora en adelante llevarán otros buscadores configurados por defecto.
La partida de Google supone un monumental traspié económico para Mozilla, que pierde de la noche a la mañana la fuente de la cual procedían más del 80% de sus ingresos. Para tratar de paliar, siquiera parcialmente, este inconveniente, la fundación ha señalado que está cerrando acuerdos con distintas herramientas de búsqueda para que patrocinen a Firefox en los países o regiones en los que quieran promocionarse.
Fruto de esta nueva estrategia, que ya no pasa por tener un sólo buscador a nivel global, Mozilla ha indicado que Yahoo será la opción de búsqueda por defecto para los usuarios de las nuevas versiones de Firefox en Estados Unidos, Yandex lo será en Rusia y Baidu en China. Está por ver qué empresas serán las escogidas en otras regiones como Europa o América Latina.