El tipo con gafas de sol y calcetines blancos que saluda a la cámara con gesto divertido mientras parece que está a punto de ser engullido por un gigantesco tiburón blanco es nada más y nada menos que Steven Spielberg.
Esta fotografía fue tomada durante el rodaje de la película Tiburón y la actitud risueña del afamado director se debe a que, obviamente, no se encuentra entre las fauces de un gran blanco de carne y hueso sino en las de uno de los escualos mecánicos que el equipo de efectos especiales fabricó para la filmación de las escenas submarinas.