Noticia curiosa del día: a finales de mayo del 2007 Microsoft lanzó Games for Windows – LIVE, una plataforma online para los videojuegos de PC con la que pretendía competir con otros servicios similares como Steam ofreciendo la posibilidad de jugar partidas simultáneas en línea a usuarios de Windows Vista y Xbox 360 e incluyendo características tales como logros, chats de voz, perfiles de jugador o listas de amigos.
El plan maestro de Microsoft era aprovechar el tirón de Halo, su franquicia estrella, para dar a conocer este servicio a millones de jugones. Así pues, meses antes del estreno de Game for Windows encargaron a un equipo de diseñadores y programadores de Microsoft Game Studios la labor de portar Halo 2, que había sido lanzado en la Xbox en el 2004, a Windows Vista.
Tal y como esperaban los mandamases de la multinacional del software, el videojuego fue finalizado a tiempo y pudieron, tal y como tenían planeado, ordenar que se estamparan suficientes DVDs como para surtir la demanda que preveían que tuviera de acuerdo a los estudios de mercado que habían realizado.
El problema surgió cuando apenas unos días antes de su lanzamiento oficial, un grupo de betatesters descubrió que uno de los programadores del videojuego, quién sabe el porqué, había incluido una fotografía suya haciendo un calvo que aparecía de acompañamiento cuando el sistema generaba un mensaje de error en concreto.
Tras conocer la inaudita noticia, los responsables del desarrollo de Halo 2 se vieron obligados a parar la producción de DVDs del videojuego hasta que se aseguraron de haber corregido la descomunal ida de olla de su trabajador (probablemente por entonces ya ex-trabajador). El imprevisto de última hora tuvo además una consecuencia añadida: un retraso en la fecha de lanzamiento de Halo 2, que pasó del 7 de mayo al 31 de mayo.
Por si eso fuera poco, y para evitar posibles demandas judiciales, no tuvieron más remedio que indicar a los centros comerciales a los que ya habían facilitado copias del videojuego que colocaran una advertencia en la portada del mismo indicando a los compradores que en el transcurso de las partidas podían encontrarse con desnudos.
Una anécdota que ahora puede que consideremos realmente curiosa pero que en su día a buen seguro que ocasionó más de un dolor de cabeza en las oficinas centrales de Microsoft. Y es que quién iba a pensarse que un programador, por su cuenta y riesgo, incluiría una fotografía suya enseñando el culo en un videojuego de las dimensiones de Halo 2